jueves, 1 de octubre de 2020

CATEQUESIS



 ¡Hola! ¿Cómo estás?



En encuentros anteriores estuvimos hablando de los MILAGROS que realizó Jesús.


Si te gustó el tema, te dejo el link de una película 👀👇





El corazón del hombre no es fácil de ganar. Jesús lo sabía. Por eso además de palabras también realizó gestos. Comprendió que las palabras no alcanzaban para hacer presente el Reino de los Cielos. Jesús enseñó con palabras y con hechos.

Lo que debemos tener en cuenta es que Jesús sanó a personas que tuvieron una gran FE en Él.  

Jesús como hombre nació, creció, sintió, actuó, padeció y murió; pero Jesús es también el Hijo de Dios, y como tal fue anunciado por los profetas y los ángeles.


Jesús nos da a conocer a Dios como Padre y nos muestra su amor a través de los MILAGROS, signos del amor de Dios.

Jesús  convivió con todos, pero especialmente con las personas que eran consideradas inferiores por su trabajo, por su condición o por su enfermedad, acercándose a ellas, escuchándolas, tocándolas y curándolas.

Jesús está atento a las necesidades de los demás, por eso daba de comer a los hambrientos multiplicando los panes y los peces, cuando enfermedades o resucitando a los muertos. Realizando MILAGROS.

Los MILAGROS son por lo tanto, el lenguaje de Dios, signos de su existencia y de su amor.



Actividades:

1. Leé las siguientes afirmaciones y respondé si son verdaderas (V) ó falsas (F).



V/ F

Jesús hacía milagros porque quería ser famoso.


Los milagros os muestran que Jesús es el Hijo de Dios.


Con los milagros, Jesús engañaba a la ente.


No había que cumplir ningún requisito para recibir un milagro.


Los milagros no sirven para nada.


Los milagros son signos del Reino de Dios entre nosotros.




2. A este link podés entrar para ordenar las palabras y descubrir la frase 👇












Para que reces esta semana, te dejo esta oración:


Dame fe, Padre Bueno
para ver la vida de Jesús y creer en El.
Dame fuerzas, Padre Bueno,
para vivir como Jesús y mostrar mi fe
en gestos de amor concreto a los demás.
Dame valentía, Padre Bueno,
para vivir mi fe en todo tiempo y lugar.
Dame perseverancia,
para no abandonar fácilmente
los caminos del servicio a los otros.
Dame fe para vivir la vida nueva
que nos trae Jesús Resucitado.
¡Que así sea, Señor!




¡Hasta la semana que viene! 

                                    Seño Moni 


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